Cuánta razón tuvo el que dijo que el tiempo pondría cada cosa en su lugar. Me encanta observar como todo lo malo se desvanece lentamente para dar paso a algo mejor, como si fuera el renacimiento de algo que en un pasado se deterioró y ahora espera con ansia su retorno. Y es que ahora sé que esto es definitivo, que se acabaron las lágrimas y los malos ratos. Hay algo dentro de mi que me dice que sí, que puede que alguna vez haya problemas, a veces son inevitables. Pero prefiero pensar de forma optimista y vivir el momento. Quiero vivir montones de momentos más y mejores que los que ya he pasado... Viajes, fotos, risas, pequeñas peleas tontas y sus respectivas reconciliaciones, atardeceres, sorpresas, paseos, fiestas, noches en la playa, etcétera. Y todo esto sólo quiero vivirlo con alguien importante, y ahora sé que ese alguien eres tú.